Descripción
ÁGATA ROSA: Esta piedra es considerada una de las grandes protectoras del mundo de los cristales. Por sus propiedades metafísicas, es muy apreciada por quienes trabajan con la preparación de rituales de protección y limpieza de energías.
Es particularmente útil para repeler energías negativas.
El ágata rosada es la roca del amor propio y el desarrollo de la evolución espiritual. Se cree que tiene además la capacidad de apaciguar las energías, calmar los ánimos y tranquilizar a su portador, confiriéndole serenidad. Es útil para las personas usualmente a la defensiva pues les permite abrirse a la oportunidad de escuchar y comprender a la otra parte sin agresiones. Estimula las habilidades psíquicas y contribuye con el desarrollo de la percepción de su portador.
Es una de las más famosas piedras que dan suerte, siendo muy utilizada como amuleto para atraer la buena suerte. Entre las propiedades de la piedra ágata encontramos las de aportar equilibrio, estabilidad y coraje en la vida.
En el campo mental la piedra estimula los sentimientos de amor y de autoconfianza, lo que favorece y mucho los procesos de curación. Por lo tanto, la persona se vuelve más tranquila, servicial, solicita y caritativa.
Ya en el campo emocional esa poderosa piedra funciona estimulando los sentimientos de compasión, amor, ternura, etc.
Por último, en el campo espiritual, esta piedra logra hacer una conexión directa con el plano espiritual, con el cosmos en sí, favoreciendo cualquier tipo de meditación y encuentro de su propio yo.